Desde Amigas de la Tierra, Ecologistas en Acción, Greenpeace y WWF celebramos la sentencia del Tribunal Supremo que desestima, de forma definitiva, el proyecto para construir en Noviercas (Soria) la que habría sido la mayor macrogranja de Europa y una de las cinco más grandes del mundo.

Con este fallo, la justicia pone punto final a un proyecto que atentaba contra un modelo de alimentación verdaderamente sostenible, generaba graves impactos ambientales y suponía maltrato y sufrimiento animal. Este proyecto, como tantos otros, es inconcebible dentro de los límites planetarios.

La sentencia llega tras años de trabajo y de defensa de un modelo ganadero más justo y respetuoso. En diciembre de 2022, el Gobierno aprobó el Real Decreto 1053/2022, que estableció normas básicas de ordenación de las granjas bovinas y fijó un límite máximo de 850 Unidades de Ganado Mayor (UGM) —equivalentes a unas 725 vacas lecheras más la recría— para nuevos proyectos o ampliaciones. Gracias a esta normativa, se puso fin al proyecto de la macrogranja de Noviercas y se cerró la puerta a la construcción de instalaciones similares en el futuro.

En 2023, las empresas Valle de Odieta S.C.L., Ganados Jiménez Cambra y Can Trébol presentaron recursos contra el Real Decreto. Nos personamos como parte demandada para defender la legalidad de la norma y asegurar su vigencia. Desde entonces, el Tribunal Supremo ha ido desestimando los distintos recursos, y ahora lo hace también con el de Valle de Odieta, en una sentencia definitiva que no admite recurso.

Tras años de espera, esta resolución llega en el momento perfecto para lanzar un mensaje claro a la sociedad y al sector: las macrogranjas no tienen sentido en un planeta en llamas. La justicia ha puesto fin a la que hubiera sido la mayor macrogranja de Europa, y lo celebramos como un paso más hacia una transición ganadera sostenible, compatible con el bienestar animal y con los límites ecológicos de nuestro planeta.